Inicio > Recursos ... > Diseño Arquitectónico - Personas con discapacidad motora

Diseño arquitectónico - Personas con discapacidad motora

Recursos para posibilitar a personas con dificultades motoras
realizar físicamente actividades tales como movilizarse, desplazarse
y accionar mecanismos u objetos

Holgura espacial: El uso de elementos de ayuda (andadores, muletas, sillas de ruedas, scooters) demanda medidas más holgadas para desplazarse, maniobrar y aproximarse a equipamientos e instalaciones. Los máximos requerimientos se plantean con el uso de sillas de ruedas. Ejemplo: la distribución de los puestos de trabajo contra las paredes disminuye las maniobras necesarias de aproximación a cada puesto y se optimizan los metros cuadrados de superficie de circulación concentrando en el centro el espacio necesario para girar.

Continuidad de las superficies de tránsito: Las dificultades en la deambulación generan formas de desplazamiento (caminar deslizando los pies por el piso o el uso de silla de ruedas) que requieren reducir al mínimo las irregularidades en la superficie del pavimento; ausencia de oquedades; superficies antideslizantes que al mismo tiempo no opongan freno al desplazamiento; pasaje continuo de un nivel a otro mediante suaves rampas; y, para desniveles mayores, medios alternativos de elevación, tales como ascensores o plataformas salva escaleras.

Alcance: Con el uso de muletas, los brazos -ocupados en sostenerlas- tienen  restringido su alcance. Quien camina con andador utiliza ambas manos y, aún utilizando una, su cuerpo está limitado para extenderse y alcanzar un objeto. Desde la posición de sentado en silla de ruedas, los brazos y las visuales están a menor altura que en bipedestación.
También, reducen la posibilidad de articulación y extensión de brazos las dificultades motrices de origen neurológico o muscular, amputaciones, enfermedades transitorias, la utilización de un yeso, entre muchas otras variantes.
Ejemplos de posibles recursos compensatorios: un plano de trabajo giratorio; un comando de botones cuyo soporte, originalmente vertical, se inclina levemente permitiendo tanto alcance visual como táctil a personas altas o de baja talla.

Accionamientos de mínimo esfuerzo físico y escasa precisión motora: La presión a ejercer sobre dispositivos tales como mecanismos cierra-puertas, sistemas de apertura y cierre de recipientes, palancas y llaves de encendido, no debe superar valores que impidan su accionamiento. A su vez, los mecanismos deben permitir ciertos márgenes de desviación en su accionamiento, facilitando la operación a personas con disfunciones neurológicas o musculares (espasticidad, distrofia muscular).
Ejemplos de posibles recursos compensatorios: monocomandos o grifos en cruz de brazo largo en lugar de canillas convencionales; palancas en lugar de botones en el depósito de inodoros.

Holgura de tiempos: Regular los tiempos de duración de determinadas fases adecuándolos a los usuarios más lentos. Aplicarlo en puertas automáticas de ascensores, cambio de luz en los semáforos, tiempos de tolerancia para cada operación en cajeros automáticos, entre otros.

Véase también: